Le tenía miedo al rechazo colectivo... A la burla despiadada, a la crítica chaquetera. Por eso me pongo el parche de entrada. Sólo quiero levantar la voz. Aguda y penetrante, como dice un amigo por ahí... Perturbadoramente anárquica, como dice otro...
Quisiera mandarme un manifiesto como el de Virginie Despentes: "Escribo para las putas, para los olvidados, los que fueron a parar a la cárcel". Aunque en realidad, preferiría decir que escribo sólo para mí y esa manga de idiotas narcisistas que me acompaña en cada viaje.
Vivir se hace un episodio engorroso y explicarlo, aún más. No libera fantasmas, ni manifiesta opciones. Es sólo el pajeo constante de quien elige gastar su tiempo en sí mismo. Al menos eso pasa conmigo. Entre emborracharme, drogarme o estirar las manos, elijo escribir. Si es drogada o borracha, también.
No le temo al desnudo, tengo algo de exhibicionista aunque prefiero el voyeurismo.

Tengo la mezcla del que escucha a Sepultura, Siniestro Total, los Angeles Negros y Spinetta. Soy punk, tan punk como Syd y Nancy, tan punk como Joe Ramone e Ida María. Y tengo el culo grande... Bien grande.

Cuando era chica, me molestaban en el colegio y me daba vergüenza. Este país de mierda siempre te acompleja. Pero tuve la suerte de crecer lejos de esta cárcel de cordillera y mar. Y me dí cuenta que mi culo vale más que las propinas de Farkas. Y lo disfruto tanto como pertenecer al mundo real y cibernético al mismo tiempo, tanto como tomarme fotos con mis hijas o comer papas a la huancaína.

Ahhh y me enamoro de cosas simples. Me enamora una sopa rica, una sonrisa, unos ojos brillantes, una buena charla, un paseo.... Ah y la música! la música es mi vida. Quiero alguien que me contenga y no alguien que me mantenga.

Tengo mucha suerte, soy bipolar. Hoy quiero tener un blog, mañana no tengo idea.

¿Vamos a cazar fantasmas, recuerdos percudidos y añoranzas épicas? Si se frena el Tagadá, la tarde se vuelve gris... Vamos por ese vértigo!!!

sábado, 15 de octubre de 2011

el amigo de un amigo

Esta es una historia real, le sucedió al amigo de un amigo... iba caminando por la calle y una maceta le cayó en la cabeza. Desde un balcón. Venía recitando concentrado un poema de Miguel Hernández: "No me conformo. Besarte fue besar un avispero que me clama al tormento y me desclava
y cava un hoyo fúnebre y lo cava dentro del corazón donde me muero".Yo siempre le dije a mi amigo, besar es fatal. Pero el no se lo dijo a su amigo.
Más vale ir por la vida a lo Pretty Woman que quedar con una planta de sombrero... al final, terminó inconsciente, doce puntos en la cabeza y una señora que para paliar la culpa le lleva galletas de avena con chocolate caliente todos los días... Lo tiene obeso y con depresión...
Y todo por un beso

lunes, 10 de octubre de 2011

"mi brillo es tu luz...", dijo

Camino desde su cama a la mía con esa ansiedad brutal que provoca entregarse por completo y hablar de más... No puedo conmigo. Cuando me pongo nerviosa no paro de hablar. ¿Por qué no me callas antes de que sea demasiado tarde? Cállame por favor!!! Pero cállame dulcemente, como cuando me abrazas. Como cuando me besas o me miras a los ojos. Ríete de mí, eso me encanta.
Me dejo llevar con miedo, inexperta. Me siento tan desprotegida, temblando, sonriendo, libre de prejuicios y de ese pelotudo intelecto rancio que me condena. Buscando no sé qué. No tengo idea si lo hice bien o lo hice mal. Seguramente le erré. Necesito que me contengas pero no sé como pedirlo.
El amor llega como miedo, y luego enceguece. Previsible y subversivo como mis locas ganas de volverte a besar y compartir miles de jugos de naranja más.
Quiero reír y sólo me sale un nervio tonto y pequeñito que revuelve mis tripas. Llego a la plaza de mañana, caminando desde tu cama a la mía, llevando nuestro olor a dormir entre mis sábanas para que se quede ahí. Conmigo.
Me siento helada, me calentaste tanto anoche que ahora el sol no me convence.
Quiero recordar cada paso, que este cosquilleo dure una eternidad como el brillo de tus sueños atrapado en tus ojitos esperando estallar.
Siempre es más difícil quedarse que irse. Y yo te hago cariño incluso cuando no estás... Es como si no me fuera nunca.